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Perfumes y fragancias. ¿Son peligrosos?

Cada vez hablamos más sobre la presencia de perfumes y fragancias en los cosméticos. ¿Creéis que la mala prensa que tienen está justificada? ¡En este post os lo contamos todo!  

¿Qué son las fragancias y dónde las encontramos?

Las fragancias son ingredientes usados para fabricación y manufactura de materiales por sus características olorosas o de mejora del olor. Son de origen natural (de plantas o de extractos origen animal como la cera de abejas) o sintético (las más usadas por su pureza, calidad y precio).  

Las encontramos en cosméticos, productos de uso doméstico, industriales, medicamentos tópicos y alimentos. Un perfume incluye entre 10 y 300 fragancias, aunque existen más de 3000 fragancias disponibles, y se diluyen en etanol para obtener una solución alcohólica.


¿Cómo identificar las fragancias en el etiquetado de los productos cosméticos?

En España hay 26 fragancias de declaración obligatoria, es decir, deben aparecer en el etiquetado si están presentes a concentración mayor de 100 partes por millón (ppm) si son productos que se aclaran o de 10 ppm si se retiran con agua. 

A continuación os dejamos el nombre de estas 26 fragancias: 

Cinamal

Geraniol

Evernia prunasti (musgo de encina)

Alcohol cinámico

Eugenol

Hidroxicitronelal

Isoeugenol

a-amilcinamal

Citral

Cumarina

Hidroxi-isohexil-3- ciclohexeno carboxaldehido (Lyral)

Citronelol

Hexilcinamal

Farnesol

Bencilo alcohol

Bencilo salicilato

Linalool

Limoneno

Butilfenil metilpropional

Anisyl alcohol

Bencilo cinamato

Bencilo benzoato

2-octinonato de metilo

a-isometil ionone

Evernia furfurácea

Amilcinámico

¿Porqué nos preocupa su presencia en los cosméticos?

Las fragancias son la segunda causa de dermatitis de contacto en nuestro país y la primera causa de alergia a cosméticos, por delante de los conservantes. Entre las alergias a fragancias, los desodorantes son los cosméticos que provocan dermatitis alérgica con más frecuencia. 

La dermatitis de contacto es una reacción inflamatoria de la piel que aparece tras el contacto con un agente externo y que provoca rojez y picor intenso en las zonas de aplicación del producto (que en ocasiones puede extenderse más allá de donde lo aplicamos). Puede ser alérgica o irritativa.

Si no somos alérgicos a las fragancias, su uso es totalmente seguro. 

 

¿Cómo podemos saber si somos alérgicos a fragancias?

El diagnóstico de alergia a fragancias debe realizarlo un@ dermatólog@ o alergólog@ en base a la sospecha clínica y al resultado de las pruebas epicutáneas. Estas pruebas consisten en la aplicación de los alérgenos sospechosos en la piel del paciente (preferentemente en la espalda) mediante unos parches adhesivos, realizándose una evaluación de la piel a las 48h y 72h para determinar si el paciente es alérgico a dicha sustancia. Dichas sustancias suelen estar comercializadas a concentraciones seguras y previamente estipuladas. Os hablaremos próximamente de ellas con más detalle! 

¿Os hemos aclarado las dudas? 

 

Dra. Sara Gómez