¿Porqué huelo mal?
En estas semanas de calor muchos de vosotros nos preguntáis el porqué del mal olor corporal, sobretodo de axilas y pies. Sabemos que a veces es un tema tabú, pero estamos seguros de que muchos querréis saberlo, y sobretodo… ¡si tiene solución!
Los dermatólogos hablamos de bromhidrosis cuando diagnosticamos mal olor corporal. Aunque esto es más frecuente después de le pubertad, hay quien tiene este problema desde algunos años antes y durante muchos años después. Además, en algunos casos se observa una tendencia familiar. Cuando el mal olor afecta a la calidad de vida de nuestros pacientes es cuando intentamos poner remedio con algún tratamiento médico. Sin embargo, existen algunos cosméticos que pueden ayudar a combatir ese mal olor o almenos mejorarlo.
¿Dónde se produce el olor?
Existen dos tipos de glándulas: las ecrinas y las apocrinas. Las glándulas ecrinas se encuentran por todo el cuerpo y se encargan de la termoregulación generando sudor. Sin embargo, el mal olor corporal está relacionado con la secreción excesiva de las glándulas apocrinas, que encontramos en zonas como axilas e ingles y que se desarrollan a partir de la adolescencia. Estas glándulas liberan un fluido aceitoso que inicialmente no tiene olor, pero que al ser degradado por bacterias provoca un olor desagradable.
¿A quién afecta el mal olor corporal?
El mal olor empeora o aparece en casos de mala higiene (sabemos que este no es vuestro caso), y además existen algunas enfermedades que facilitan su aparición, como obesidad o diabetes. También se han descrito casos de bromhidrosis tras depilación láser.
Por las características de la piel, encontramos bromhidrosis con más frecuencia en hombres, países asiáticos (donde se diagnostican más) y pieles oscuras (por las características de las glándulas apocrinas).
¿Y qué podemos hacer?
Lo importante en estos casos es usar buenos jabones antisépticos adaptados a nuestro tipo de piel y antitranspirantes. Cuando éstos no son suficientes, los dermatólogos nos planteamos tratamiento con antibióticos tópicos, que suelen ser efectivos si se seleccionan correctamente.
En algunos casos, puede recomendarse tratamiento con láser e incluso con toxina botulínica si hay sudoración excesiva, y aunque el efecto no es permanente, es muy últil en verano, además de seguro.
¿Os hemos ayudado? Esperamos que hayáis resuelto las dudas!
Dra Sara Gómez