¿Manchas en la cara? La guía definitiva para conocer y diferenciar las manchas
Las alteraciones en la pigmentación facial son muy frecuentes, y muchas de las manchas que aparecen en la cara (o en otras zonas del cuerpo) alteran el aspecto de la piel y generan preocupación y malestar, mientras que otras, no se asocian a ninguna sensación negativa.
Pero no todas las manchas en la cara son iguales, así que aclaremos los conceptos:
· Dermatosis papulosa nigra: Este tipo de manchas marrones o negras aparecen fundamentalmente en personas de piel oscura (fototipos IV a VI) y con mayor frecuencia procedentes de África. Se trata de pequeños bultitos oscuros que miden entre 1 y 5 mm. Se localizan en las mejillas y en la frente, y tienden a aumentar con la edad.
· Efélides: O las mejor conocidas como pecas. Aparecen a partir de los 2 o 3 años de edad y son características de personas con fototipos claros y pelirrojos (I y II). Se trata de manchas pequeñas (1-2 mm), de color marrón claro, que tienden tienden a oscurecerse en verano tras la exposición solar y se aclaran en invierno. Aparecen en las mejillas, nariz, brazos y escote. La causa principal para su aparición es la herencia genética, aunque también influyen los episodios de exposición solar intensa en la infancia y adolescencia.
· Hiperpigmentación postinflamatoria: La aparición de procesos inflamatorios de cualquier origen (eczemas, dermatitis de contacto alérgicas, acné o picaduras) en personas con fototipos altos (III-VI) puede producir lo que se conoce como hiperpigmentación postinflamatoria, que no es más que la aparición de una mancha en la zona de la piel previamente inflamada.
Se trata de manchas de color variable desde marrón claro hasta oscuro o grisáceo, y se localizan donde previamente se encontraba la lesión inflamada.
· Léntigos: Son las clásicas manchas solares. Aparecen sobre todo a partir de los 50 años en personas con fototipos de I a IV. Miden entre pocos milímetros y varios centímetros, son de color entre amarillento y marrón más oscuro y a diferencia de las pecas su color se mantiene estable todo el año. Se localizan en zonas expuestas al sol (cara, manos, antebrazos, espalda y pantorrillas). Los principales motivos para su aparición son ambientales: exposición solar, polución, tabaco… aunque también existe influencia genética. La dra. De Asís lo explica también en este post.
· Melasma: El melasma afecta al 20% de las mujeres mayores de 20 años. Se trata de manchas de color marrón a grisáceo, grandes (normalmente de varios cm) y que aparecen en las mejillas, labio superior o frente (pero no alrededor de los ojos).
Afecta sobre todo a fototipos altos (III-V) y existe una importante predisposición genética. En las personas predispuestas genéticamente, las lesiones aparecen y empeoran con la radiación solar y ciertos estímulos hormonales (afecta hasta 1/3 de las pacientes embarazadas y por ello se conoce también como También conocido como cloasma o máscara del embarazo.). Tenéis más en este post.
· Nevus melanocíticos: Los nevus melanocíticos son los conocidos como lunares. Los que aparecen en la cara suelen estar algo abultados y medir entre 2 y 6 milímetros. Suelen presentar un color de marrón a rosado, e incluso algunos presentan el mismo tono que la piel que los rodea. Aparecen en la infancia o adolescencia y en muchos casos tienden a abultarse con la edad (y no hay que confundirlos con verrugas).
· Queratosis seborréicas: También os hemos hablado de ellas en el blog, se trata de manchas o bultos (no siempre están elevados) de color desde marrón claro hasta negro, y muchas veces de superficie rugosa, muy diferentes a la piel que las rodea. Pueden medir desde pocos milímetros hasta varios centímetros.
Como todas las lesiones que hemos mencionado son benignas, sin embargo, pueden inflamarse espontáneamente (e incluso, si hay suerte, desprenderse y desaparecer).
Praetorius C, Sturm RA, Steingrimsson E. Su-induced freckling: ephelides and solar lentigines. Pigment Cell Melanoma Res. 2014;27:339-350
Feliz semana!
Dra. Inés Escandell