Hidratación facial
Salut!
Hoy vamos con un tema fundamental, y para eso empezaremos con la pregunta clave:
¿Hay que usar crema hidratante facial todos los días?
La cara es nuestro principal símbolo de identidad, y el aspecto de la piel facial dice mucho de nuestro estado de salud y bienestar. Es por eso que el cuidado de esta zona es uno de los hábitos de belleza más extendidos del mundo y las cremas hidratantes faciales ocupan un espacio más o menos importante en nuestros armarios.
Sin embargo, ¿es necesario usarlas?
Es una pregunta que escuchamos poco en la consulta, quizá porque la respuesta parezca demasiado obvia ya que la sociedad (y especialmente la publicidad) parece clamar que SÍ, es OBLIGATORIO HIDRATARSE LA PIEL.
Lo que no tenemos claro es si sabemos el porqué.
¿Qué importancia tiene una piel hidratada?
La piel tiene muchas funciones biológicas, pero quizá la fundamental es actuar como una barrera entre interior y exterior. Esta barrera está formada por células (que podríamos comparar con ladrillos) y factores hidratantes naturales, fundamentalmente lípidos (grasas), proteínas y agua, que en este caso serían el cemento. Esta combinación se encuentra en el estrato córneo (la capa más superficial de la piel) y además de la protección aporta flexibilidad a la piel.
Pero el equilibrio entre los componentes de nuestra barrera no es continuo. La exposición diaria a factores irritantes y el envejecimiento van a producir alteraciones en el equilibrio entre estos componentes que se traduce en cambios visibles de nuestra piel.
¿Cuáles son esos factores irritantes cutáneos?
La mayoría de los cambios que se producen en la piel son secundarios a la exposición a elementos tan habituales como el agua, jabón, fricción, radiación ultravioleta, aire frío o caliente, polución.. y prácticamente cualquier producto si la exposición es frecuente.
Además, con el paso del tiempo se va perdiendo un porcentaje importante de agua, grasas y proteínas del estrato córneo, empeorando la función barrera.
Y esto, ¿cómo se demuestra?
Tanto en las consultas dermatológicas como en los laboratorios de investigación existen técnicas objetivas para medir el estado de la piel.
Una de las que más relación tiene con la hidratación es la “pérdida transepidérmica de agua” o TEWL por sus siglas en inglés. También se puede medir con cintas adhesivas específicas (tape stripping), el cutometer (mide la elasticidad de la piel), el D-squame (mide el porcentaje de descamación), el sebumeter (medición de la cantidad de grasa que hay en la piel), la fotografía digital con filtros de ultravioleta (permite observar manchas u otras lesiones que no se ven a simple vista) e incluso técnicas más complejas como la ecografía cutánea o la microscopía confocal.
Pero además de esto, la exploración clínica realizada por dermatólogos experimentados es también una herramienta muy útil que nos permite clasificar de forma rápida a los pacientes según el aspecto de su piel.
Entonces, ¿qué debo hacer?
Utilizar una crema adecuada para nuestro tipo de piel aporta una barrera extra que impide la pérdida transepidérmica de agua y ayuda a enriquecer nuestros factores hidratantes naturales, especialmente cuando ya existen signos de envejecimiento. Ser constantes con el uso de estos productos evita el desarrollo de imperfecciones e irritaciones y favorece el aspecto flexible y saludable de la piel.
Por todo esto os aconsejamos preparar vuestra piel para las actividades diarias con una crema hidratante adecuada, es un gesto rápido que puede ahorrarnos muchos problemas.
Y bueno, como esto no podía terminar así, vamos a hacer una breve lista de nuestras cremas favoritas para todo tipo de pieles:
Para pieles secas: Hyaluron- Filler de Eucerin día, noche o ambas si realmente la piel es muy seca)
Para pieles normales/mixtas: Endocare Cellage cream de Cantabrialabs
Para pieles grasas: Acglicolic classic gel de Sesderma
Pieles sensibles: Crema Tolérance Extrême de Avène, en crema para pieles más secas o en emulsión para pieles mixtas o grasas.
Pieles con acné: Keracnyl serum de Ducray
¡Buen día!
Dra Inés Escandell